Opinión.
El mundo se encuentra en una lucha de poderes entre potencias nucleares que se encubren por medio de sistemas políticos para dividir las sociedades y ganar seguidores.
Los países han cerrado fronteras, las exportaciones e importaciones
se encuentran al mínimo o nulo porcentaje entre naciones. Las empresas han
reportado pérdidas desde la primera semana de confinamiento por la cuarentena
decretada en las naciones, inclusive algunas se han declarado en banca rota.
El desempleo en américa latina avanza sin tregua, los fondos
de recuperación en Europa no tienen un panorama seguro de como distribuirse de
manera equitativa según las necesidades de cada país del bloque, los seguros
contra el desempleo en estados unidos están al límite, los límites en Asia
menor son vulnerados constantemente y cada día las tensiones aumentan.
Los fondos de inversión en el mundo cambian sus directrices
presionados por el FMI y el nuevo banco de prestado que creo China.
Los medios de comunicación se separan según el país que
apoyan y con ellos la información no es transparente para todo el mundo,
creando una distorsión entre la realidad y la ficción; con ello los canales
independientes e influencer han crecido de manera exponencial transmitiendo la
información desde localidades remotas para el mundo entero por medio de las
redes sociales. Y son estas las que en los últimos meses se han escalonado
tanto en el mundo de la comunicación como en el mundo de los negocios con
crecimientos de hasta un 30%.
Información según el país subyugado.
Algunos países apoyando a las principales potencias
económicas y nucleares del mundo han puesto la prensa a trabajar bajo la teoría
de que el virus fue creado en un laboratorio para posteriormente ser esparcido
para dominar la especie humana. Como también del otro lado se niega tal teoría,
haciendo énfasis en las restricciones por el bien de salud.
A la par que las fronteras se cierran y la economía se
desploma al punto que algunos países entran en recesión económica.
Los protagonistas.
En este escenario de tensiones por todos los continentes, relucen
papeles importantes.
Xi Jinping con el dominio de china y sus planes expansionista, ha
estado tratando de tomar el control total de Hong Kong mediante la ley de
seguridad general al igual que de expandir su dominio sobre el mar meridional.
El aporte económico de China a la OMS le ha puesto en el foco de atención bajo la
teoría de ser el país creador del COVD 19.
Donald Trump con sus políticas agresivas frente a socios y
rivales de estados unidos, con una visión clara de modernizar el estado
americano antes que invertir en la guerra y
proponer desde el inicio de la pandemia la continuidad en los mercados. Trump
ha sido calificado como el hombre que le interesa primero la economía antes que
la salud y también como el hombre que enfrenta en estados unidos a la “supuesta
elite Iluminati”.
Vladímir Putin a pasos lentos
pero grandes ha estado solidificando una unión con Europa por medio del
programa Nord stream, al mismo tiempo que ha puesto orden en la confrontación
entre Turquía y a nivel interno tomo medidas desde el inicio de la pandemia
cerrando fronteras, fortaleciendo los hospitales y distribuyendo la carga de la
economía entre el gobierno y las empresas para no perjudicar a la clase obrera.
Finalmente, la humanidad tiene un
enemigo más letal que el covid 19; este es un enemigo que tiene tanto poder
como para dividir y destruir el planeta entero.
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